La Alcide & Alcott y asociados, más conocida como la A&A es una macrocorporación comercial que
engloba diversos campos de actuación. Constructoras, empresas de servicio,
transportes, materias primas, comunicaciones y entretenimiento. Y varias más
que no aparecen en las listas de servicios oficiales ni publicitadas.
La base principal está en París
Noveau, una de las lunas de Origen y, aunque está extendida en todas partes, su
área de influencia es mayor en las zonas que no están bajo el control de
Seguridad Interorbital. Eso incluye las lunas de Origen, las de K-Dick y Hades.
En total, casi 30 millones de
personas dependen directa o indirectamente de esta gran corporación.
En el año 345 d.f. (cuando sucede
el primer volumen de las Crónicas), el responsable directo de la mitad Alcide
es Néstor Alcide, uno de los hombres más poderosos del sistema. Nada parecía
indicar que el menor de los tres hermanos, un talentoso violinista, se viera
obligado a hacerse cargo de la empresa familiar a una ante la misteriosa muerte
de toda su familia en extrañas circunstancias. La cuestión es que ese joven,
ante el asombro de socios y rivales, demostró estar más que capacitado para
dirigir la compañía y fue el principal impulsor de su crecimiento exponencial.
Años más tarde, con una ventajosa posición ya consolidada, Alcide inició la
fusión con Alcott, la familia que en aquel entonces le disputaba la mitad del
sistema.
Los Alcott son una familia
numerosa, con una fuerte tradición al más puro estilo de Origen. Es difícil
saber quién lleva las riendas pero se cuenta de ellos que son como las cabezas
de la Hidra, corta una y saldrán tres.
Desde la fusión, ambas empresas
han funcionado a la práctica como independientes, pero como un gran monstruo para
todas las pequeñas corporaciones que aún luchan por hacerse con un pedazo del
pastel.
La A&A cuenta con uno de los
ejércitos más poderosos del sistema. La mayoría formados por leónidas
extraplanetarios provenientes de los centros Valicourt. Un ejército famoso por
su fiereza y su poco amor a las reglas, llegando a rivalizar, incluso, con
Seguridad Interorbital.
Se podría decir que la A&A es
un gobierno en sí misma, con leyes propias y un concepto de justicia diferente.
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